¿Hay remedios caseros para regular el periodo?

A quién no le ha pasado…justo el día del paseo y de repente y sin aviso, zas, te baja el periodo. Y fijo fijo pasa cuando estás menos preparadx porque “nah... todo bien, no llevo nada, me tiene que bajar en dos semanas”.   

Tener periodos irregulares es súper normal en algunos momentos de la vida:

• Cuando eres adolescente, usualmente en los primeros años después de que te baja por primera vez.
• Después de un parto y durante la lactancia.
• Cuando estás en la perimenopausia, esto es, antes de que ocurra la menopausia.
• Cuando comienzas o paras un método anticonceptivo hormonal. 

Por lo demás, también es normal que tu ciclo menstrual cambie mes a mes algunos días en cualquier momento de la vida. Hay muchas cosas que pueden hacer que tu ciclo cambie, por ejemplo, hacer dietas estrictas, ejercicio muy intenso, subir o bajar de peso muy rápido, el estrés, tener alguna enfermedad, tomar ciertos medicamentos, viajes largos, trastornos del sueño, entre otros. 

Sin embargo, si tu periodo es irregular de manera constante, puede ser una señal de otras condiciones de salud como problemas hormonales, de tiroides, síndrome de ovario poliquístico (SOP), enfermedad pélvica inflamatoria, fibroides y miomas uterinos, diabetes, infecciones, ciertos cánceres o tumores benignos, menopausia precoz, entre otras. Por último, si no te ha llegado el periodo siempre es bueno descartar un embarazo haciéndote una prueba.  

¿Cómo saber si es normal que no te baje cuando debería? 

Aunque cada cuerpo y ciclo es un poco diferente, hay ciertos rangos para lo que se consideran ciclos normales.

El ciclo menstrual dura desde el primer día de tu regla hasta el primer día de la siguiente. En promedio, los ciclos menstruales duran entre 25 y 30 días, pero también pueden ser de 21o de más de 35 días. Por otro lado, los días de sangrado o el periodo, dura entre 2 y 5 días.

Sin embargo, tanto el ciclo menstrual como los días de sangrado pueden ser diferentes para cada persona. 

La clave de todo es saber qué es lo normal para ti y para esto, ayuda muchísimo conocer tu ciclo haciéndole seguimiento cada mes y hacerte chequeos ginecológicos según las indicaciones. Hacerle seguimiento a tu ciclo es muy fácil, puedes usar una app o anotar en un calendario:

• Qué día te baja la regla.
• Qué día termina.
• Cantidad de tu flujo menstrual.
• Cólicos y otros síntomas como síndrome premenstrual (el famoso PMS en inglés), cambios en tu energía, humor, emociones, piel, digestión y todo lo notes que te sucede en estos días.  

Si sabes qué es lo normal para ti, será muy fácil darte cuenta cuando hay algo que no lo es. 

¿Hay remedios caseros o hierbas que ayuden a regular tu ciclo menstrual?

Lo primero y muy importante es que si notas que tu periodo está fuera de lo normal para ti, antes de tomar hierbas o remedios naturales, es importante consultar con un profesional de la salud.

No recomiendo preguntarle a doctor Google y autorrecetarte por una razón: aunque puede que tomar hierbas no te haga daño, quizá tampoco te ayude si es que hay algún problema más serio que necesite atención médica y tratamiento. 

Dicho esto, comúnmente se han usado varias hierbas o remedios caseros para ayudar a regular naturalmente el ciclo menstrual. Algunas de las más comunes son:

• Salvia (salvia officinalis):  se usa para ayudar con problemas menstruales (entre muchos otros usos), regular el periodo, aliviar los cólicos, el SOP, la amenorrea (ausencia de menstruación) y molestias en la menopausia como los calores o sofocos. Sin embargo, no se recomienda si estás en embarazo o durante la lactancia. Algunas variedades pueden causar efectos secundarios cuando se toma en grandes cantidades o por un periodo de tiempo largo. También puede afectar ciertos medicamentos para la diabetes o tener un efecto sedativo en algunas personas. 

• Fruto del árbol casto (vitex agnus-castus): en inglés también conocido como “chaste tree”. Se ha usado para una variedad de condiciones, entre esas, problemas menstruales y del ciclo. No es recomendada para personas en embarazo, en periodo de lactancia o con ciertas condiciones hormonales. Puede interactuar con ciertos medicamentos y tener otros efectos secundarios como náusea, vómito, dolor de cabeza, entre otros. 
• Ortiga mayor (urtica dioica): en inglés stinging nettle. Muy conocida y usada para varias condiciones de salud, y también para problemas con los periodos como el síndrome premenstrual, periodos muy abundantes e irregulares. No se recomienda durante el embarazo y lactancia. Puede tener efectos secundarios. 

• Caléndula (calendula officinalis): muy usada para ayudar a aliviar los cólicos. También se usa para regular los periodos, entre otras condiciones. Puede causar alergia en algunas personas y tampoco se recomienda en el embarazo y lactancia. 
• Marrubio (marrubium vulgare): también llamada malva del sapo o horehound en inglés. Entre muchos otros usos, por ejemplo en la cocina, es conocida por ayudar a aliviar los cólicos, el síndrome premenstrual y regular el periodo. No debe usarse en el embarazo y lactancia. Puede tener algunos efectos secundarios. 
• Melisa (melissa officinalis): conocida como lemon balm en inglés. Muy común para ayudar con los cólicos, el síndrome premenstrual, la dismenorrea y regular el periodo. También se usa para ayudar con el estrés (entre otros). Dependiendo de la dosis puede causar algunos efectos secundarios. No se recomienda en el embarazo y lactancia ni en personas con problemas de tiroides, entre otros. 

El asunto con las hierbas es que aunque son de uso común y quizá conozcamos amigxs y familiares a quienes les hayan funcionado, todavía no hay estudios suficientes que demuestren su efectividad. Y por eso, no podemos asegurar que te van a funcionar. También, es importante tener en cuenta que en algunos casos pueden tener interacciones con medicamentos o causar efectos secundarios relacionados con otras condiciones de salud.

Por eso, es mejor siempre consultar con tu doctorx o profesional de salud. Si tienes preguntas, chatea en vivo con nuestrxs educadores de Chatea/Textea o ponte en contacto con el centro de salud de Planned Parenthood más cercano a ti.