Sarna humana o escabiosis en la piel
¿Qué es la sarna humana o escabiosis en la piel?
La sarna humana (también conocida como escabiosis en la piel o scabies en inglés) es una condición de la piel que produce picazón y que es causada por pequeños parásitos. Se transmite por contacto de piel a piel, usualmente durante el sexo. La sarna no es peligrosa y se puede curar.
La sarna humana es una condición de la piel.
La sarna humana (escabiosis) es causada por los ácaros de la sarna, que son parásitos muy pequeños, similares a insectos, que infectan la capa más superficial (externa) de tu piel. La sarna humana causa sarpullidos, irritación y mucha picazón. Se transmite fácilmente de una persona a otra a través del contacto de piel a piel.
Los ácaros de la sarna hacen túneles (excavan) en la capa externa de tu piel donde ponen huevos. De los huevos nacen más ácaros, aunque la mayoría de las personas con sarna humana (escabiosis), solo tiene entre 10 y 15 ácaros en su cuerpo a la vez. Los ácaros son muy pequeños, por lo que puede que no los veas, pero seguramente notarás la picazón e irritación que causan.
La sarna humana puede ser muy incómoda, pero usualmente no es peligrosa. Se puede curar con pastillas o cremas medicadas.
¿Cómo se contagia la sarna humana?
La sarna humana (escabiosis) se contagia por el contacto directo de piel a piel. Esto ocurre usualmente durante el sexo, especialmente cuando los cuerpos están cerca o en contacto durante un largo tiempo (por ejemplo, cuando duermes con otra(s) persona(s) en la misma cama).
La mayoría de las personas adultas se contagian de sarna humana cuando tienen relaciones (sexo), pero también te puedes contagiar de otras maneras. La sarna humana puede pasarse (transmitirse) a otras personas que vivan en tu casa. También, es común que haya sarna humana en lugares donde hay muchas personas juntas y puede haber mucho contacto de piel a piel (por ejemplo en hogares para personas mayores, prisiones y guarderías para niñxs). A veces, puedes contagiarte de sarna humana (escabiosis) por compartir ropa, toallas o sábanas con alguien infectado.
Es muy difícil que te contagies de sarna humana por tener un contacto casual y rápido con alguien, por ejemplo por darle la mano o un abrazo. Usualmente, tampoco te contagias de sarna por sentarte en un inodoro. La mayoría de las veces, para que la sarna se pase de una persona a otra, se necesita tener contacto muy cercano con alguien infectado.